domingo, mayo 13, 2007

NO sola y No abandonada

Río Quino, Febrero 2007




Después del mi último grito desesperado, nuevamente el Señor tuvo misericordia de mí, a pesar que hay cosas que no han cambiado no me siento sola ni abandonada.

No tengo dolor interior.

Gracias Dios porque tu reino y porque tu Espíritu Santo han venido a mi vida una vez más.